OPINIÓN

Luciferianos

Denise Dresser EN REFORMA

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El gobierno de Peña Nieto acaba de enviar al diablo a las instituciones. El PRI acaba de darles una patada directo a Hades, en alianza con Lucifer. La destitución intempestiva e inexplicable de Santiago Nieto, titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales sólo lo confirma. Con tal de asegurar la impunidad, el priismo está dispuesto a destituir a los pocos funcionarios que actuaban para combatirla. Con tal de salirse con la suya, el peñanietismo es capaz de destruir o frenar lo que desde la ciudadanía se ha venido construyendo. Hoy no hay procurador. No hay fiscal para delitos electorales. No hay fiscal anticorrupción. No hay ley orgánica de la Fiscalía General. El PRI que se vanagloria por ser el creador de las instituciones ahora se aboca a crear un infierno donde no existen o no funcionan.