INTERNACIONAL
Avanza con tropiezo mariguana en Uruguay
Florencia Pereira/Especial
Montevideo, Uruguay (17 mayo 2015) .-00:00 hrs
El avance de la ley que regula el mercado de la mariguana en Uruguay avanza... pero con tropiezos.
Actualmente, 3 mil autocultivadores y 15 clubes de cannabis, cuyos miembros ascienden a alrededor de 600 personas, acceden a esta droga por la vía legal.
Sin embargo, en total, cerca de 145 mil consumidores todavía recurren al mercado negro.
La principal razón es la falta de confianza de los consumidores.
De acuerdo con un sondeo de Latin America Marijuana Research Initiative, 39 por ciento no planea registrarse en una lista que integra el Gobierno y que es requisito indispensable para acceder a la droga tanto en clubes como en farmacias.
"No me genera confianza el registro. Lo siento como una especie de prontuario policial. Para comprar alcohol no necesito registrarme ¿por qué tengo que dar mis datos para acceder en las farmacias? Si mañana gana otro partido y quieren derogar la ley, ¿quién me asegura que no seré tratado como un potencial enfermo?", contó Santiago, de 37 años, docente y usuario frecuente de mariguana.
El problema, además, es burocrático.
Las autoridades han retrasado la decisión sobre qué empresa cultivará la mariguana que será vendida en las farmacias, otra de las modalidades de venta de cannabis contempladas en la ley, la cual fue aprobada en diciembre de 2013 como alternativa a la lucha contra el narcotráfico.
Además, no han regulado el mercado de las semillas y no han dado presupuesto al Instituto de Regulación y Control del Cannabis (Ircaa).
En cuanto a los clubes, de los 15 que se presentaron ante el Ministerio de Educación y Cultura, sólo dos han culminado el trámite y se manejan con permisos provisorios.
Uno de estos clubes de mariguana es el CLUC (Cultivando la Libertad Uruguay Crece), compuesto por 45 personas -el máximo legal-, en su mayoría universitarios con un promedio de 28 años y algunos de los cuales participaron en la redacción de la ley del mercado de la hierba a través de la ONG Proderechos.
Cada socio paga como cuota unos 25 dólares y se le entregan 40 gramos del mariguana por mes. En el mercado negro los 40 gramos de mariguana paraguaya cuesta unos 30 dólares.
El CLUC es de los clubes más baratos, ya que cultivan en exteriores. En la mayoría de esos casos se cobra una matrícula anual que ronda los 170 dólares y una cuota mensual de 85 dólares.
Además del pago se deben tener 18 años cumplidos, ser uruguayo o residente legal y ser capaz.
Pese a ello, para Damián, un joven de 24 años y estudiante de agronomía, el Ircaa no ha sabido responder a la presión de la industria internacional en el mercado de las semillas.
"Se da una contradicción, ya que tenemos que ir al mercado ilegal para conseguir las semillas para obtener la mariguana legal", explicó.
En el CLUC cosechan la mariguana que plantaron hace 6 meses con semillas que debieron obtener de la mariguana ilegal prensada paraguaya, aunque confían que, a futuro, tener su propia siembra les da un mayor control sobre la calidad de la hierba.
"Dentro de la variedades que hay de mariguana nosotros plantamos lo que nos gusta, en base al efecto que buscamos obtener.
"Estamos haciendo una encuesta de las variedades entre los miembros del club y a partir de allí decidimos. Hay una experimentación y a su vez tenemos la garantía de la calidad", resumió.
Uno de los desafíos que enfrentan en los clubes es la seguridad, pues se han registrado robos de plantas que luego son comercializadas en el mercado ilegal.
El CLUC tiene un sistema de vigilancia con alarma y cercado eléctrico, y una de las reglas del club es mantener la ubicación lo más oculta posible.
En la mayoría de los clubes el ingreso a las instalaciones de personas ajenas está vedado.
Hace unos meses en el club sufrieron un allanamiento por una denuncia anónima. La Policía llegó y tuvieron que ir a declarar, luego de presentar los papeles correspondientes fueron liberados y el caso archivado.
"Hubo un cambio, en otras circunstancias nos hubieran destrozado las plantas. Aunque nosotros tuvimos suerte, sabemos de otros clubes en lo que hubo una denuncia y aunque estaban registrados la Policía quemó la plantas", cuenta Martín, uno de los integrantes del club, de 27 años y economista.
"Aunque hay avances el prejuicio se mantiene y mi familia no sabe de esto", se justifica.
Otro de los mecanismo que avanza lentamente, pero con mucho entusiasmo, es el de los autocultivadores.
El primero en iniciar el trámite en agosto del año pasado fue Juan Vaz, un activista de la mariguana legal.
"Yo hace 20 años que cultivo, estuve preso en 2007 por tener plantas en casa, esto es un sueño hecho realidad", dijo Vaz sobre lo que significó la aprobación y entrada en vigencia de la ley que permite tener hasta 6 plantas por casa- habitación, sin importar la cantidad de miembros del núcleo familiar.
Vaz tiene un negocio donde vende todo lo necesario para iniciar el autocultivo y donde incentiva a los interesados para que dejen el mercado negro.
"Esto claramente es un camino para combatir el narcotráfico. El otro día vino un cliente y me contaba que lo había llamado al "dealer" para ofrecerle mariguana paraguaya. Y él le dijo que estaba plantando y que aunque aún no tenía para fumar prefería esperar a que seguir consumiendo cualquier porquería. El dealer le dijo: contigo ya perdí 12 clientes", resumió Vaz.
Para las autoridades uruguayas, de tener éxito su modelo de regulación del mercado de la mariguana éste podría convertirse en referencia para otras naciones latinoamericanas.
"Hay un gran interés de los países latinoamericanos. El año pasado en Viena en la Comisión de Estupefacientes tuvimos unas 56 reuniones bilaterales interesados por esto.
"Lo mismo en la OEA yo fui representante ante ese organismo y nos escucharon porque hay una necesidad de discutir nuevos enfoques y porque evidentemente hay un fracaso en el modelo de combate", dijo a REFORMA Milton Romani, Secretario General de la Junta Nacional de Drogas.
Para el funcionario, incluso, se podría pensar en el futuro en regular otras drogas.
"¿Por qué no? ya lo dijo el Presidente Tabaré Vázquez", dijo en referencia a declaraciones del Mandatario sobre que se podría regular el mercado de la cocaína.
Lo anterior se desprende del hecho de que Uruguay nunca tuvo penalizado el consumo de drogas y de una profunda confianza en los ejes sobre los que se basa la estrategia actual sobre estupefacientes, la cual, explicó tiene visión de continuidad, un enfoque de derechos humanos y de salud, y que es equilibrada entre aplicación de la ley y prevención.
"En el Estado uruguayo hay una óptica de no penalizar acciones privadas que no afectan a terceros (...)
"Se ha avanzado mucho en el tema investigación y por otro lado en el combate al lavado de dinero. Aquí era un "viva la pepa" que a través de la sociedades anónimas financieras de inversión que eran adecuadas para negocios turbulentos. En 2011 se desmontaron esas sociedades", recordó Romani.
Sobre si la cruzada contra el tabaco que lleva el país adelante representa una contradicción a la postura frente a la mariguana, el Secretario consideró que, de hecho, se trata de algo muy coherente.
"Lo que se ha demostrado es que el mercado solito genera muchas veces daños y se necesita la intervención del Estado. Frente a sustancias como el tabaco y alcohol la decisión desde una óptica de salud pública es regular los lugares para fumar, la publicidad, etc.
"Y en el caso de la mariguana, que estaba regulado por la ley penal y que ésta se demuestra ineficiente, (pues) llevémoslo a la regulación del mercado que tenga que ver con salud pública", argumentó.
Sobre la fecha final en la que la mariguana comenzará su venta en farmacias, Romani dijo que se encuentran en un proceso licitatorio con las empresas que van a producir la mariguana en terrenos estatales.
"Hay 5 empresas interesadas y estamos finalizando un proceso que es un cuello de botella en el que las empresas deben comprobar con lujo de detalles su origen, ingresos y características para evitar que entren cárteles.
"No queremos correr riesgos, por lo que nos vamos a tomar el tiempo necesario. El software para las farmacias también ya está listo", aseguró.
Actualmente, 3 mil autocultivadores y 15 clubes de cannabis, cuyos miembros ascienden a alrededor de 600 personas, acceden a esta droga por la vía legal.
Sin embargo, en total, cerca de 145 mil consumidores todavía recurren al mercado negro.
La principal razón es la falta de confianza de los consumidores.
De acuerdo con un sondeo de Latin America Marijuana Research Initiative, 39 por ciento no planea registrarse en una lista que integra el Gobierno y que es requisito indispensable para acceder a la droga tanto en clubes como en farmacias.
"No me genera confianza el registro. Lo siento como una especie de prontuario policial. Para comprar alcohol no necesito registrarme ¿por qué tengo que dar mis datos para acceder en las farmacias? Si mañana gana otro partido y quieren derogar la ley, ¿quién me asegura que no seré tratado como un potencial enfermo?", contó Santiago, de 37 años, docente y usuario frecuente de mariguana.
El problema, además, es burocrático.
Las autoridades han retrasado la decisión sobre qué empresa cultivará la mariguana que será vendida en las farmacias, otra de las modalidades de venta de cannabis contempladas en la ley, la cual fue aprobada en diciembre de 2013 como alternativa a la lucha contra el narcotráfico.
Además, no han regulado el mercado de las semillas y no han dado presupuesto al Instituto de Regulación y Control del Cannabis (Ircaa).
En cuanto a los clubes, de los 15 que se presentaron ante el Ministerio de Educación y Cultura, sólo dos han culminado el trámite y se manejan con permisos provisorios.
Uno de estos clubes de mariguana es el CLUC (Cultivando la Libertad Uruguay Crece), compuesto por 45 personas -el máximo legal-, en su mayoría universitarios con un promedio de 28 años y algunos de los cuales participaron en la redacción de la ley del mercado de la hierba a través de la ONG Proderechos.
Cada socio paga como cuota unos 25 dólares y se le entregan 40 gramos del mariguana por mes. En el mercado negro los 40 gramos de mariguana paraguaya cuesta unos 30 dólares.
El CLUC es de los clubes más baratos, ya que cultivan en exteriores. En la mayoría de esos casos se cobra una matrícula anual que ronda los 170 dólares y una cuota mensual de 85 dólares.
Además del pago se deben tener 18 años cumplidos, ser uruguayo o residente legal y ser capaz.
Pese a ello, para Damián, un joven de 24 años y estudiante de agronomía, el Ircaa no ha sabido responder a la presión de la industria internacional en el mercado de las semillas.
"Se da una contradicción, ya que tenemos que ir al mercado ilegal para conseguir las semillas para obtener la mariguana legal", explicó.
En el CLUC cosechan la mariguana que plantaron hace 6 meses con semillas que debieron obtener de la mariguana ilegal prensada paraguaya, aunque confían que, a futuro, tener su propia siembra les da un mayor control sobre la calidad de la hierba.
"Dentro de la variedades que hay de mariguana nosotros plantamos lo que nos gusta, en base al efecto que buscamos obtener.
"Estamos haciendo una encuesta de las variedades entre los miembros del club y a partir de allí decidimos. Hay una experimentación y a su vez tenemos la garantía de la calidad", resumió.
Uno de los desafíos que enfrentan en los clubes es la seguridad, pues se han registrado robos de plantas que luego son comercializadas en el mercado ilegal.
El CLUC tiene un sistema de vigilancia con alarma y cercado eléctrico, y una de las reglas del club es mantener la ubicación lo más oculta posible.
En la mayoría de los clubes el ingreso a las instalaciones de personas ajenas está vedado.
Hace unos meses en el club sufrieron un allanamiento por una denuncia anónima. La Policía llegó y tuvieron que ir a declarar, luego de presentar los papeles correspondientes fueron liberados y el caso archivado.
"Hubo un cambio, en otras circunstancias nos hubieran destrozado las plantas. Aunque nosotros tuvimos suerte, sabemos de otros clubes en lo que hubo una denuncia y aunque estaban registrados la Policía quemó la plantas", cuenta Martín, uno de los integrantes del club, de 27 años y economista.
"Aunque hay avances el prejuicio se mantiene y mi familia no sabe de esto", se justifica.
Otro de los mecanismo que avanza lentamente, pero con mucho entusiasmo, es el de los autocultivadores.
El primero en iniciar el trámite en agosto del año pasado fue Juan Vaz, un activista de la mariguana legal.
"Yo hace 20 años que cultivo, estuve preso en 2007 por tener plantas en casa, esto es un sueño hecho realidad", dijo Vaz sobre lo que significó la aprobación y entrada en vigencia de la ley que permite tener hasta 6 plantas por casa- habitación, sin importar la cantidad de miembros del núcleo familiar.
Vaz tiene un negocio donde vende todo lo necesario para iniciar el autocultivo y donde incentiva a los interesados para que dejen el mercado negro.
"Esto claramente es un camino para combatir el narcotráfico. El otro día vino un cliente y me contaba que lo había llamado al "dealer" para ofrecerle mariguana paraguaya. Y él le dijo que estaba plantando y que aunque aún no tenía para fumar prefería esperar a que seguir consumiendo cualquier porquería. El dealer le dijo: contigo ya perdí 12 clientes", resumió Vaz.
Prevén ser mercado referente
Para las autoridades uruguayas, de tener éxito su modelo de regulación del mercado de la mariguana éste podría convertirse en referencia para otras naciones latinoamericanas.
"Hay un gran interés de los países latinoamericanos. El año pasado en Viena en la Comisión de Estupefacientes tuvimos unas 56 reuniones bilaterales interesados por esto.
"Lo mismo en la OEA yo fui representante ante ese organismo y nos escucharon porque hay una necesidad de discutir nuevos enfoques y porque evidentemente hay un fracaso en el modelo de combate", dijo a REFORMA Milton Romani, Secretario General de la Junta Nacional de Drogas.
Para el funcionario, incluso, se podría pensar en el futuro en regular otras drogas.
"¿Por qué no? ya lo dijo el Presidente Tabaré Vázquez", dijo en referencia a declaraciones del Mandatario sobre que se podría regular el mercado de la cocaína.
Lo anterior se desprende del hecho de que Uruguay nunca tuvo penalizado el consumo de drogas y de una profunda confianza en los ejes sobre los que se basa la estrategia actual sobre estupefacientes, la cual, explicó tiene visión de continuidad, un enfoque de derechos humanos y de salud, y que es equilibrada entre aplicación de la ley y prevención.
"En el Estado uruguayo hay una óptica de no penalizar acciones privadas que no afectan a terceros (...)
"Se ha avanzado mucho en el tema investigación y por otro lado en el combate al lavado de dinero. Aquí era un "viva la pepa" que a través de la sociedades anónimas financieras de inversión que eran adecuadas para negocios turbulentos. En 2011 se desmontaron esas sociedades", recordó Romani.
Sobre si la cruzada contra el tabaco que lleva el país adelante representa una contradicción a la postura frente a la mariguana, el Secretario consideró que, de hecho, se trata de algo muy coherente.
"Lo que se ha demostrado es que el mercado solito genera muchas veces daños y se necesita la intervención del Estado. Frente a sustancias como el tabaco y alcohol la decisión desde una óptica de salud pública es regular los lugares para fumar, la publicidad, etc.
"Y en el caso de la mariguana, que estaba regulado por la ley penal y que ésta se demuestra ineficiente, (pues) llevémoslo a la regulación del mercado que tenga que ver con salud pública", argumentó.
Sobre la fecha final en la que la mariguana comenzará su venta en farmacias, Romani dijo que se encuentran en un proceso licitatorio con las empresas que van a producir la mariguana en terrenos estatales.
"Hay 5 empresas interesadas y estamos finalizando un proceso que es un cuello de botella en el que las empresas deben comprobar con lujo de detalles su origen, ingresos y características para evitar que entren cárteles.
"No queremos correr riesgos, por lo que nos vamos a tomar el tiempo necesario. El software para las farmacias también ya está listo", aseguró.
