BUENA MESA
Protege tu cerebro con... ¡vino!
Carlos Borboa
Cd. de México (19 agosto 2015) .-11:02 hrs
Los especialistas recomiendan una copa de vino tinto al día con el propósito de limpiar las arterias y mejorar la circulación, sin embargo, el consumo moderado del fermentado de uva podría tener beneficios adicionales al organismo.
Científicos de la Rush University Medical Center de Chicago, Estados Unidos, comprobaron que el consumo regular de vino tinto ayuda a preservar las habilidades cognitivas y reduce el riesgo de padecer demencia senil y Alzheimer.
"El vino tinto es rico en polifenoles (compuestos antioxidantes), sustancias que han sido relacionadas con la protección del cerebro", señala la investigación publicada en Alzheimer's & Dementia, diario de The Alzheimer's Association.
"En investigaciones previas, estas propiedades protectoras han mostrado la capacidad de retrasar la demencia senil (...) y, cuando se consume como parte de la dieta mediterránea, el vino es capaz de retrasar al desarrollo de la enfermedad de Alzheimer".
El equipo de investigadores, liderado por Martha Clare Morris, especialista de epidemiología de la nutrición, llevó a cabo pruebas en 960 voluntarios del Rush Memory and Aging Project, estudio en el que participan comunidades de retiro del área de Chicago. Desde 2004, los científicos analizaron el efecto de más de 140 alimentos específicos en la dieta de los voluntarios.
Según Morris, la pruebas han demostrado una clara relación entre el consumo moderado de bebidas fermentadas de uva y la correcta función cognitiva.
De la misma forma que las uvas, alimentos como las granadas, las moras azules, la naranja y el té -hojas y brotes de la camellia sinensis-, ofrecen una buena proporción de compuestos antioxidantes asociados con el correcto funcionamiento cognitivo.
Científicos de la Rush University Medical Center de Chicago, Estados Unidos, comprobaron que el consumo regular de vino tinto ayuda a preservar las habilidades cognitivas y reduce el riesgo de padecer demencia senil y Alzheimer.
"El vino tinto es rico en polifenoles (compuestos antioxidantes), sustancias que han sido relacionadas con la protección del cerebro", señala la investigación publicada en Alzheimer's & Dementia, diario de The Alzheimer's Association.
"En investigaciones previas, estas propiedades protectoras han mostrado la capacidad de retrasar la demencia senil (...) y, cuando se consume como parte de la dieta mediterránea, el vino es capaz de retrasar al desarrollo de la enfermedad de Alzheimer".
El equipo de investigadores, liderado por Martha Clare Morris, especialista de epidemiología de la nutrición, llevó a cabo pruebas en 960 voluntarios del Rush Memory and Aging Project, estudio en el que participan comunidades de retiro del área de Chicago. Desde 2004, los científicos analizaron el efecto de más de 140 alimentos específicos en la dieta de los voluntarios.
Según Morris, la pruebas han demostrado una clara relación entre el consumo moderado de bebidas fermentadas de uva y la correcta función cognitiva.
De la misma forma que las uvas, alimentos como las granadas, las moras azules, la naranja y el té -hojas y brotes de la camellia sinensis-, ofrecen una buena proporción de compuestos antioxidantes asociados con el correcto funcionamiento cognitivo.