NACIONAL
'No hará turismo Papa'.- Arizmendi
Irene Savio
Cd. del Vaticano, Vaticano (19 diciembre 2015) .-00:00 hrs
El Obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi, aseguró que el Papa no hará turismo durante su visita a México.
"Él no va para endulzar el oído de las personas. Tratará de llegar al corazón de las personas para que todos nosotros afrontemos nuestros problemas, sin evadirlos o ignorarlos", dijo.
El Papa Francisco recibió en audiencia privada a Arizmendi, al Obispo de Tuxtla Gutiérrez, Fabio Martínez, y su adjunto, José Luis Mendoza, para analizar algunos detalles de su visita apostólica a Chiapas, prevista para el 15 de febrero de 2016.
Durante el encuentro privado, al Papa le fueron entregados cinco documentos, cuatro cartas y un informe de los Obispos chiapanecos.
El documento es un informe en el que hay lo que se espera la Iglesia local de la visita y se subraya que uno de los temas más apremiantes es que en ese Estado persiste el racismo y la marginación contra los indígenas.
La razón por la cual el Papa Francisco vendrá a México son los problemas que tiene, en particular la pobreza, la violencia y el narcotráfico, señaló Arizmendi en entrevista.
"Él nos explicó por qué su decisión de ir a los lugares a dónde va (). Por una parte, Chiapas, con el aspecto de la pobreza, de la migración y, sobre todo, de los indígenas. Luego Michoacán por el problema de la violencia y del narcotráfico.
"Y también Ciudad Juárez por el conflicto del paso hacia Estados Unidos de tantos migrantes", añadió.
Indicó que estos tres Estados -Chiapas, Michoacán y la región fronteriza de Chihuahua- son los sitios que Francisco ha escogido por su simbolismo.
"A veces los mexicanos podríamos sentirnos un poco orgullosos de pensar que va a México, pero va porque somos problemáticos. Tenemos que ser humildes y sencillos para decir que el Papa viene a México porque hay problemas y el Papa quiere estar en los problemas", añadió.
En esta línea, indicó que su desplazamiento a Ciudad de México también remite al deseo del Papa de ir hasta la Basílica de la Virgen de la Guadalupe.
"Él nos ha dicho que va a la Ciudad de México, no por la Ciudad de México, puesto que ahí ya ha estado en varias ocasiones Juan Pablo II. Va a la Ciudad de México justamente por la Virgen de Guadalupe, que es un amor que lleva en el corazón", afirmó.
En este contexto, Arizmendi dijo que su impresión es que lenguaje del Papa durante el visita será muy claro y directo.
Además de reunirse con el Pontífice, los Obispos también mantuvieron encuentros con el delegado para los viajes papales, Alberto Gasbarri, y el maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias, Guido Marini.
Con este último fueron decididos la silla, la imagen del crucifijo y la mitra que se va a usar en la misa en San Cristóbal de las Casas, a la que se prevé asistan al menos 100 mil personas, la mayoría de estos objetos serán elaborados por indígenas de la entidad.
Informó que algunos lugares de Chiapas fueron descartados por seguridad.
"Él no va para endulzar el oído de las personas. Tratará de llegar al corazón de las personas para que todos nosotros afrontemos nuestros problemas, sin evadirlos o ignorarlos", dijo.
El Papa Francisco recibió en audiencia privada a Arizmendi, al Obispo de Tuxtla Gutiérrez, Fabio Martínez, y su adjunto, José Luis Mendoza, para analizar algunos detalles de su visita apostólica a Chiapas, prevista para el 15 de febrero de 2016.
Durante el encuentro privado, al Papa le fueron entregados cinco documentos, cuatro cartas y un informe de los Obispos chiapanecos.
El documento es un informe en el que hay lo que se espera la Iglesia local de la visita y se subraya que uno de los temas más apremiantes es que en ese Estado persiste el racismo y la marginación contra los indígenas.
La razón por la cual el Papa Francisco vendrá a México son los problemas que tiene, en particular la pobreza, la violencia y el narcotráfico, señaló Arizmendi en entrevista.
"Él nos explicó por qué su decisión de ir a los lugares a dónde va (). Por una parte, Chiapas, con el aspecto de la pobreza, de la migración y, sobre todo, de los indígenas. Luego Michoacán por el problema de la violencia y del narcotráfico.
"Y también Ciudad Juárez por el conflicto del paso hacia Estados Unidos de tantos migrantes", añadió.
Indicó que estos tres Estados -Chiapas, Michoacán y la región fronteriza de Chihuahua- son los sitios que Francisco ha escogido por su simbolismo.
"A veces los mexicanos podríamos sentirnos un poco orgullosos de pensar que va a México, pero va porque somos problemáticos. Tenemos que ser humildes y sencillos para decir que el Papa viene a México porque hay problemas y el Papa quiere estar en los problemas", añadió.
En esta línea, indicó que su desplazamiento a Ciudad de México también remite al deseo del Papa de ir hasta la Basílica de la Virgen de la Guadalupe.
"Él nos ha dicho que va a la Ciudad de México, no por la Ciudad de México, puesto que ahí ya ha estado en varias ocasiones Juan Pablo II. Va a la Ciudad de México justamente por la Virgen de Guadalupe, que es un amor que lleva en el corazón", afirmó.
En este contexto, Arizmendi dijo que su impresión es que lenguaje del Papa durante el visita será muy claro y directo.
Además de reunirse con el Pontífice, los Obispos también mantuvieron encuentros con el delegado para los viajes papales, Alberto Gasbarri, y el maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias, Guido Marini.
Con este último fueron decididos la silla, la imagen del crucifijo y la mitra que se va a usar en la misa en San Cristóbal de las Casas, a la que se prevé asistan al menos 100 mil personas, la mayoría de estos objetos serán elaborados por indígenas de la entidad.
Informó que algunos lugares de Chiapas fueron descartados por seguridad.
