Los lavaderos de Almoloya, que se remontan al siglo 17, podían reunir a 96 mujeres al mismo tiempo. Crédito: Centro INAH-Puebla
Tras la restauración del inmueble se prevé una visita pública controlada para evitar aglomeraciones que deterioren el espacio. Crédito: Centro INAH-Puebla
El Gobierno de Puebla recuperó los lavaderos, un monumento histórico que usufructuaban empresarios privados. Crédito: Centro INAH-Puebla
En la parte inferior, los dos canales subterráneos que suministraban agua a los lavaderos fueron excavados para hacerlos transitables, a modo de túneles y así explotarlos turísticamente. Crédito: Enrique Gómez / CINAHP