OPINIÓN

Amedrentar científicos

Carlos Bravo Regidor EN REFORMA

3 MIN 30 SEG

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Para los políticos la ciencia siempre es un arma de dos filos. Por un lado, puede servirles para apropiarse de su fortaleza como forma de conocimiento, o al menos de su prestigio social, y convertirla en un instrumento de poder, incluso en un recurso no solo para persuadir sino para obligar. Las políticas basadas en argumentos y sobre todo en evidencias susceptibles de ser consideradas científicas adquieren una autoridad que es muy difícil disputar en buena lid. Pero, por el otro lado, la ciencia también puede significarle un peligro a los políticos por constituir una fuente de información que los refuta, que puede exhibir con mucha contundencia lo falso o engañoso de sus aseveraciones, hasta demostrar que lo que hacen no necesariamente tiene los efectos que ellos desean o presumen. Las críticas basadas en argumentos y sobre todo en evidencias susceptibles de ser consideradas científicas también adquieren una autoridad que es muy difícil disputar en buena lid.