VIDA

¿Echas limón a la herida?

Paloma Villanueva

Cd. de México (14 junio 2016) .-11:30 hrs

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Lavar las heridas con jabón, dejarlas descubiertas o arrancarse las costras son errores que retrasan la cicatrización, aumentan el riesgo de infección y pueden dejar marcas en la piel, señala Adán Fuentes, dermatólogo del Hospital Español.

Si te raspaste, lo más probable es que sólo se haya desprendido parte de la epidermis (escoriación). Antes de aplicar primeros auxilios, evalúa la severidad de la herida.

Si se ve el hueso, si el sangrado es excesivo o si el área lastimada es muy amplia, necesitas atención médica.

Si es una herida superficial, lo primero que debes hacer es colocar la zona lastimada bajo el chorro del agua fría.

"El manejo inmediato es lavar sólo con agua. El jabón provoca mucho ardor y no es necesario, sólo dejas correr el agua sobre la herida y la secas con una gasa haciendo un ligera presión sin tallar.

"Tiene que ser con gasa porque el algodón o papel se puede pegar y, si no lo despegas bien, eso interfiere con la cicatrización", apunta.

En el botiquín solemos tener alcohol, merthiolate, antisépticos con yodo, violeta de genciana o agua oxigenada a los que recurrimos en caso de herida, pero el experto pide evitar todo esto y mejor aplicar una pomada de sulfadiazina de plata.

"Funciona como antiséptico, es decir, impide la presencia de bacterias para prevenir infección y ayuda a mantener húmeda la herida.

"Algo importante es tapar la herida. Eso va en contra de la creencia tan arraigada de dejar que la herida se seque, que le dé el aire. Hoy el manejo adecuado de la herida es mantenerla húmeda, por eso se pone una gasa y se cubre con cinta microporosa", explica.

Con la humedad se evita, en lo posible, la formación de costras que elevan el riesgo de infección y el tiempo de cicatrización.

Los primeros días debes lavar y hacer la curación (aplicar la pomada y cubrir con la gasa) una vez al día y, cuando se forme la costra y la herida ya no produzca secreción, debes cambiar la pomada por petrolato, que sirve como emoliente y lubricante hasta que las costras se desprendan solas.

"No hay que arrancar las costras porque se vuelve a hacer una herida, el proceso de cicatrización reinicia y es más probable que queden marcas", subraya Fuentes.

La posibilidad de que quede cicatriz depende del manejo adecuado a la herida y de su profundidad, pero si aplicas el petrolato dos o tres veces al día para mantener la piel lubricada y te proteges del sol, la piel recupera su tono normal, aunque eso toma tiempo.
Paso a paso
1 Lava sólo con agua y sin tallar.

2 Aplica pomada de sulfadiazina de plata y cubre con una gasa.

3 Repite la curación 1 vez al día hasta que ya no genere secreción.

4 Aplica petrolato a la costra y cúbrela hasta que se caiga.

5 Aplica petrolato dos o tres veces al día para humectar la piel dañada.

CUIDADO:
- Si hay enrojecimiento excesivo en el contorno de la herida el dolor aumenta o hay exceso de secreción, la herida puede estar infectada y es necesario que acudas al médico.

- A veces en la farmacia recomiendan pomadas con neomicina o nitrofurazona, pero no se aconsejan porque pueden causar irritación y alergias.