Cantú desmanteló la fábrica y llevó una máquina a la casa de cada uno de sus trabajadores y los capacitó para apoyar en la fabricación de los cubrebocas. Crédito: Especial
De coser vestuarios para grandes compañías de artes escénicas en México y el extranjero, la fábrica del ex bailarín Aureleano Cantú reinventó la vocación y ahora produce cubrebocas.