La exhibición, que llevó por nombre "Luz y Color", le permitió a quienes la recorrieron, echar a volar la imaginación y encontrar entre pinceladas y trazos sus propias formas, hecho que les pareció muy especial, particularmente, entre quienes conocen a la autora desde hace ya varias décadas y han visto su crecimiento creativo.
"Conozco a Fer desde hace 35 años y, la verdad, siempre ha tenido un estilo padrísimo; creo que transmite muchísima claridad, pero, al mismo tiempo, también bastante profundidad.
Es algo que termina por volverse sobresaliente y que llama bastante la atención", dijo el jinete Nicolás Pizarro.
Fue en una terraza en Lomas de Chapultepec donde se llevó a cabo la muestra, a la que asistió familia de Fernanda Velasco y también amigos de toda la vida, quienes se reencontraron después de un tiempo sin verse, a causa de sus agendas, pero con la emoción intacta de volver a compartir un instante rodeados de cuadros repletos del talento de la artista anfitriona.