OPINIÓN

La final

Guadalupe Loaeza EN REFORMA

4 MIN 00 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
El próximo domingo es la final del Campeonato o Mundial de Futbol Qatar 2022. En lo que a mí se refiere, nunca había estado tan involucrada en un partido de futbol. Seguramente se debe a que mi marido es fan de este deporte tan universal. Son millones de personas de todo el mundo involucrados en este torneo y, sorprendentemente, hay cada vez más mujeres aficionadas. Lo que me ha llamado mucho la atención son los hinchas de cada uno de los equipos que han asistido a los estadios de Qatar. ¡Qué manera de entregarse, de animar a su equipo y de celebrar cuando triunfa sobre su contrincante! Lloran, se abrazan, gritan, insultan, maldicen, se besan, brincan, juntan las manos como rezando, muestran sus banderitas o carteles con el nombre de su jugador preferido, cantan, sudan, chiflan, bailan y disfrutan o sufren hasta el último momento del partido. Todo esto me resulta muy contagioso y conmovedor. Especialmente si consideramos que más de dos años duró el confinamiento (que aún no cesa del todo) del Covid 2020. Ya nos enteraremos si después de todas estas aglomeraciones no hay un repunte de contagios.