OPINIÓN

Madame metrogate

Denise Dresser EN REFORMA

4 MIN 00 SEG

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La imagen lo dice todo. Claudia Sheinbaum, hace unos días, corriendo detrás de la comitiva presidencial que camina por la calle, dejándola atrás. Apresura el paso y da pequeños saltos, para poder estar cerca de López Obrador y su círculo cercano. Quiere ser vista y reconocida como "corcholata". Quiere que se le perciba como tal. La niña aplicada que emula a su mentor, tratando de convertirse en una calca al carbón del hombre al que admira. Hablando como él, haciendo giras como él, comiendo como él, asumiendo posturas idénticas a las de él. Y ahora, en el nuevo escándalo de la Línea 12, mintiendo abiertamente como lo hace AMLO a diario. Él niega datos, ella niega peritajes. Él cuenta teorías conspiratorias, ella las reproduce. Pero lo que a él le suma puntos políticos, a ella se los resta. Al rechazar el informe de la empresa noruega sobre el Metrogate, se ha vuelto la pequeña Claudia.