En lo espeso del bosque tropical de la Península de Osa, donde la vegetación se abraza con el mar turquesa del Golfo Dulce, El Remanso Rainforest Lodge se levanta como un refugio ecológico que cautiva los cinco sentidos de quienes buscan conexión auténtica con la naturaleza.
Sus villas privadas, construidas con madera natural recolectada de los árboles caídos del propio entorno, se integran al diseño y ofrecen terrazas con plunge pool, duchas al aire libre y vistas que capturan tucanes, diferentes especies de monos y guacamayas en un mismo instante.
Aquí la sostenibilidad es una filosofía muy arraigada: energía solar e hidroeléctrica, gestión de aguas, compostaje y ausencia total de plásticos de un solo uso. Cada mañana inicia con el canto de aves y el rugir de los monos aulladores que despiertan hasta quienes tienen un sueño profundo, seguido de caminatas guiadas por senderos y puentes colgantes que llevan a cascadas, piscinas naturales de agua salada, lagunas escondidas y rincones de observación de fauna silvestre.
El spa, inspirado en tradiciones locales, brinda rituales y tratamientos que renuevan cuerpo y mente. Al caer la tarde, el restaurante honra la cocina regional con ingredientes frescos y recetas heredadas con un toque contemporáneo. Más que hospedaje, es un retorno a lo esencial para escuchar el latido de la selva.
Toma nota: No dejes pasar "La primera caminata", expedición matutina con guía naturalista en la que el bosque despierta con un coro irrepetible.
Escondido en un rincón privilegiado del bosque tropical del Parque Nacional Piedras Blancas, junto a las apacibles aguas del Golfo Dulce, Dolphin Quest Jungle-Lodge es una joya ecológica que revela una experiencia donde la naturaleza dicta el ritmo del Pacífico Sur costarricense.
Sus alojamientos rústicos, acogedores y rodeados de jardines tropicales, cuentan con hamacas, cocinas equipadas, baños privados, duchas al aire libre y energía solar. Su huerto orgánico abastece de una amplia variedad frutas, verduras y especias frescas a la cocina, donde los sabores caseros se sirven con calidez.
Los huéspedes participan en tours de avistamiento de delfines nariz de botella y manchados que siguen a las embarcaciones y regalan un espectáculo, así como ballenas jorobadas que, en temporada, muestran saltos majestuosos, que sin duda, crean momentos únicos de conexión con la vida marina del entorno.
También, se pueden realizar caminatas guiadas que llevan a descubrir senderos con colonias de monos aulladores, capuchinos y aves exóticas como guacamayas, aunque hay que tener los ojos bien abiertos para apreciarlos. Más que un hospedaje, es un punto de encuentro con lo salvaje, donde la hospitalidad se mezcla con historias y respeto por el medio ambiente. Aquí cada detalle -desde la comida hasta las actividades- está impregnado de la esencia del lugar.
Toma nota: Reserva la salida de esnórquel: te esperan arrecifes coloridos, peces tropicales y cascadas ocultas conocidas solo por locales.
Frente a la elegante Marina Bahía Golfito, Amaka Ocean Living Lodge redefine la serenidad contemporánea dentro de la naturaleza intacta al fusionar la intimidad y el confort de un hotel boutique con la energía del mar del Golfo Dulce.
Sus diez habitaciones, decoradas con estilo contemporáneo y acentos costarricenses, ofrecen vistas al agua o la montaña, WiFi de alta velocidad, hamacas y espacios pensados para el descanso. La gastronomía del restaurante La Playa rinde un homenaje a los ingredientes locales con un toque creativo.
Este sitio de hospedaje también cuenta con una zona comercial integrada por heladerías, boutiques de joyería y moda, además de un malecón para paseos en familia, amigos o en solitario para contemplar los colores anaranjados del atardecer. El embarcadero privado es punto de partida para aventuras en velero, paddle board, kayak, pesca deportiva o simplemente recorrer sus aguas mientras los guías expertos comparten historias sobre las especies marinas que ahí habitan.
Cabe destacar que aquí las mañanas comienzan con desayuno local, el día se llena de expediciones al Refugio Nacional de Fauna Silvestre Golfito, y cada puesta de sol se disfruta desde la terraza con una bebida tropical en mano. Al caer la noche, el sonido de las olas acompaña cenas a la luz de las velas y pláticas bajo un cielo tachonado de estrellas.
Toma nota: Disfruta un amanecer desde el Crew Lounge, con bar y jacuzzi frente al Golfo Dulce, perfecto para ver cómo la luz transforma el puerto.