El reporte encontró que las reglas de origen tuvieron el impacto más directo en la comercialización y manufactura automotriz desde que entró en vigor el acuerdo en 2020.
Con la revisión prevista del T-MEC en 2026, los fabricantes automotrices y proveedores de autopartes esperan un impulso para refinar las reglas de origen para adaptarlas al crecimiento de los vehículos eléctricos, cambio en los aranceles y requerimientos laborales.