Pocas veces al reseñar me sorprendo con las marcas. Los fabricantes tecnológicos hablan mucho y accionan poco. Cada año, los más grandes, iteran series. Más de lo mismo. No alabo a Sony, pero reconozco que la bocina portátil Sony ULT Field 5 es un gran producto.
Al verla, es imposible no pensar en la bocina inalámbrica con diseño cilíndrico XG300, disponible también en su sitio web en México, tanto por sus dimensiones, especificaciones e igualdad en precio de lista, solo que ULT es superior en todo sentido.
Mucho, o todo, tiene que ver con algo simplísimo: una cuerda. Sí. La bocina incluye una correa de tela del mismo color del equipo, en mi caso negra, con un arnés que se ajusta en una zona del aparato para engancharse. Esto abrió múltiples posibilidades.
Primero la usé para patinar junto con un amigo en un parque público de CDMX. En efecto, como la cinta se puede ajustar, la apreté a mi cuerpo y disfrutamos éxitos viejos del regional mexicano.
El segundo uso fue una licencia creativa. Soy parte de un colectivo que lee textos periodísticos en el espacio público, así que me llevé a una plaza la Sony ULT Field 5 para amplificar mi voz.
Con micrófono en mano comencé a hablar. Para esta clase de eventos probé diferentes bocinas y nunca logré eliminar el molesto eco, con la bocina de Sony no fue necesario. El sonido fue claro, fuerte y seco.
Aunque las personas ciertamente me ignoraron, con excepción de unos estudiantes de secundaria, aseguro que mi voz retumbó las paredes de la plaza cercana. Hasta unos comerciantes se asomaron a ver el escándalo. Esos 20 mil Hz sí se pueden ver, digo, oír.
Otro aspecto joya es la batería. 25 horas no está nada mal. Aparte, si tienes una emergencia, en 10 minutos repones la energía para 100 minutos más. Lo comprobé y no son 100 minutos, más bien 60, aproximadamente una hora, pero saca de apuros.
Bien, profundizando en el sonido, hay textura. El corazón es el botón ULT que potencia los bajos. Al presionarlo suena un bello estruendo, que indica que activaste la función. Muy bien ahí, pero hay que contar toda la historia.
Esta obsesión por los bajos de la función ULT sacrifica el otro extremo del espectro, pues este modo crea agudos chillones y una voz áspera. Esto lo noté en las canciones de nuevos álbumes de Mabe Fratti, Silvana Estrada, Hayley Williams, Juana Molina y Rosalía.
Quizás es una exquisitez, pero una bocina no es solo para fiestas, a veces uno quiere trabajar en casa con música suave, sencilla, con enfoque en la voz.
Y bueno, la correa es el GRAN acierto, pero 3.3 Kg luego de un rato expone el hombro a una lesión, sobre todo si haces otra actividad, como patinar o ir en bici, por ejemplo.