Aunque los predios de Amalacachico, en Xochimilco, están catalogados como suelo de conservación, obras de viviendas no cesan. Crédito: Iván Sosa
Los canales por donde se desplazaban las trajineras para trasladar las cosechas, reciben aguas negras del drenaje de los inmuebles ilegales. Crédito: Armando Vázquez
Sabedores de que se trata de un asentemiento ilegal, los residentes se muestran agrestes hasta con los censadores del INEGI. Crédito: Iván Sosa