OPINIÓN

Videoterapia

Juan Villoro EN REFORMA

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Hace unos meses escribí sobre un peculiar síntoma de nuestro tiempo: la infidelidad televisiva. Las series provocan la adicción que en el siglo XIX provocaba el folletín, con una diferencia: la lectura se ejerce en soledad mientras que la tele es (o debería ser) un entretenimiento compartido.